Brad Pitt disfrutó de un paseo por la memoria de la vida gay de la ciudad de Nueva York, cuando subió al escenario para recoger el premio al mejor actor en los Premios“New York Film Critics Circle”.
Pitt estaba con un amigo en el West Village que es el barrio gay por excelencia en Nueva York y según comenta no encontró que la ciudad fuera un lugar hostil en absoluto.
Entre sus recuerdos le vino a la memoria una de las calles más conocidas entre el público gay de la ciudad, Christopher Street y exclamó, sin tapujos: “¡Dios mío, hay un montón de chicos guapos en Nueva York!”
A pesar de que Pitt no consiguió el papel en la serie para la que se presentaba, dos años más tarde se convertiría en una gran estrella con su memorable actuación en la película Thelma & Louise en 1991.
El actor, ahora de 48 años de edad y padre de seis hijos con su pareja Angelina Jolie, se ha convertido en un aliado incondicional en la lucha por la igualdad de LGBT y en particular por el matrimonio homosexual en los últimos años.
Cuando el matrimonio homosexual se aprobó en Nueva York el año pasado, Pitt se pronunció a favor de la legislación federal.
“Es alentador que Nueva York se ha unido al movimiento para conceder los mismos derechos del matrimonio a sus ciudadanos”, dijo en un comunicado. “Pero es un derecho constitucional de cada estadounidense el poder casarse con la persona que ama, sin importar el estado en que habiten. Ningún Estado debe decidir quién puede casarse y quien no. Gracias a la incansable labor de muchos, algún día, pronto terminará esta discriminación y todos los estadounidenses podrán disfrutar de su derecho a la igualdad en el matrimonio”.
Brad Pitt es además una persona valiente por reconocer en un país tan conservador que no cree en Dios. En una entrevista de julio de 2009 afirmó que no creía en Dios y que era probablemente un 20 por cien ateo y un 80 por cien agnóstico. “Siempre me pregunté muchas cosas sobre el mundo, incluso cuando estaba en la guardería. Un gran interrogante para mí era la igualdad. Si hubiese sido criado con otra religión, ¿podría tener la misma opinión del Cielo que tiene un cristiano? Mi madre tuvo que entrar en mi habitación a hablarme. Fui muy afortunado por haber tenido ese diálogo con ella, pero en la secundaria comencé a darme cuenta que me sentía diferente a los demás”. Afirmó el actor durante la entrevista.
Fuente: sentidoG
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